El Gato de Schrodinger despues de la caja.

Luego de pasar encerrado frente a una fuente con cesio, el gato en cuestión adquirió el conocimiento del saco de huevas de Schrodinger (si, a él se le ocurre meter un gato en la caja y decir "acá está el principio de incertidumbre").
El gato tomó a su amo, le dio una bofetada y luego lo encerró en la caja, a ver si le gustaba estar metido recibiendo radiación de cualquier tipo. Luego, sin nada más, se puso a resolver puzzles. Cuando vio que, primero, podía pensar en resolver puzzles, se dijo a si mismo "¿qué mierda pasa?". Se sentó en el sillón y prendió una pipa. Luego la apagó y se fue a dormir. Otra sorpresa más: debido al tiempo que estuvo cerca de esa fuente radioactiva, nuestro felino amigo ahora BRILLA EN LA OSCURIDAD.
En la mañana, ya viendo que nada era como antes, se sirvió un café y unas tostadas y fue a buscar a sus antiguos camaradas. Fue así como se pudo olvidar un momento de que poseía una inteligencia superior a su amo y vivió el día "gatísticamente" junto a Koma, Morgan y Tinkyspaider. Éste último está aprendiendo a hablar en "humano", gracias a las lecciones de Schrodie (se cambió en nombre en el registro civil). Ya puede decir, además de "aló", "yaaaaa, poooh" y otros vocablos gatunos, "MACACO".