¡DAJA!

| miércoles, 26 de noviembre de 2008 | |

Como todos los días, me llegan sorpresas desde tu lado, maldita. Aparece el Victor y me dice "¿así que te vino a buscar tu mina, Malo?". Mi cara de "qué te importa" se hizo notar. Le pregunté como supo y la respuesta fue más que obvia: pelambre de "las chiquillas". Calmé mi cólera. Me pregunté hasta cuándo vas a seguir con "tu verdad" y no contarás la verdad completa. Rabia, si rabia, eso es lo que siento. Si, ya no te amo. Te odio, mierda, con todo mi ser. Todo ápice de cariño que sentía hacia ti desapareció desde el momento en que mostraste tu verdadera cara. La manipulación era la punta del iceberg. Descubrí que los genes "Guevaras" son bien fuertes en ti. Desde llamadas telefónicas a MIS amigos (si, hue'ona psicópata, deja de llamar a MIS amigos), mails a mi familia (PSICÓPATA), uno que otro ataque, persecución en la calle, negación de verdad ( decirle a TODO EL MUNDO "no le puse el gorro" es cara-de-rajismo puro), por nombrar algo.
Filo, tengo amigos de verdad (si, mierda, amigos, no esas huevás que tenía en la U) y gente con la que puedo pasar un buen rato en la U. Y eso hice. Estudié y listo. Llegó al hora de la prueba y traté te responder lo máximo de materia. Llego a la parte de ejercicios y los hago, sin problema. Fin, termino la prueba. Y te miro a ti y veo tu cara de "¿cómo mierda se hace?". Mis músculos faciales actuaron de forma positiva en los extemos de mi boca. Sonreí, victorioso, de una lucha ganada de forma silenciosa. entrgué la prueba y me fui. Apenas cerré la puerta dije esa palabra que conoces... espero que la oyeras...

DAAAAAAAJAA!

Por extraña razón mi sonrisa no se extinguía. Es más, se vió maximizada luego, pero en esta columna tan llena de miasma no nombraré el motivo, pues no quiero que se manche de tu mierda y tus trancas.

1 comentarios:

Nariz Sangrante Says:
27 de noviembre de 2008, 18:13

Onomatopeya culiá esa...

Salu'os weón, bakán la entrevista.